Poemas de Juan Manuel Sánchez Gordillo - La web de emijrp
Estos son algunos poemas de Juan Manuel Sánchez Gordillo, alcalde de Marinaleda, extraidos del libro "El Mesías rojo".
Los he transcrito porque no los he encontrado en ningún lugar de Internet.
Poned la libertad ----------------- Poned la libertad muy alta, compañeros, para que ningún fusil pueda alcanzar a derribarla. Ponedla al alcance de los niños para que puedan hacerla cada vez más humana y al alcance de los viejos para que la preñen con su experiencia y la hagan madura e indestructible. Poned la libertad al alcance de los pobres para que puedan romper las cadenas de la explotación y fecundar el planeta de una Humanidad al fin igualitaria. Pero que nadie se emborrache y quiera utilizarla como un achaque para sembrar de barrotes el planeta. Ni para montar nuevas máquinas de opresión. La libertad no es una propiedad privada de nadie ni de nada, sino una necesidad colectiva que debe ser repartida a trozos iguales. Igual que debe repartirse el pan cuando tenemos hambre Porque los hombres estamos hambrientos, pero que muy hambrientos de libertad. Así, pues, compañeros, poned la libertad muy alta para que no la pueda alcanzar ningún tirano. Pero ponedla muy cerca de los pueblos y de los hombres que andan peleando desde siglos por una Humanidad superior. Que nadie se olvide que la libertad es una flor que no puede crecer entre la clase, las castas ni ninguna otra forma de diferencia. ¿Dónde está nuestra tierra? --------------------------- ¿Dónde está nuestra tierra, se pregunta el jornalero, la que regamos ayer a fuerza de sufrimientos la que labramos a golpes de nuestros cuerpos? ¿Dónde está la riqueza parida de nuestro aliento? ¿Quién se llevó las cosechas y el dolor de mis abuelos y la sonrisa de aquella hija que se me fue muriendo de tanto trabajo de tan poco alimento? ¿Y ahora vienes tú con tus leyes y derechos con tus jueces a quitarme todo esto? Que nos echan de la tierra -------------------------- Que nos echan de la tierra que nos roban el oficio que ya no nos queda nada que andamos a golpe limpio de limosna en limosna como si fuéramos mendigos. ¿Dónde van esas mujeres pidiendo para sus hijos, y esos viejos al sol en sus tristezas perdidos y esos niños rebuscando y hasta a veces perseguidos y ese fusil dónde va corriendo hacia el mismo sitio y ese tren cargado sudando los mismos gritos? Los puños se levantaron votamos todos unidos para empezar el hambre contra el hambre que sufrimos para decir muy alto que el pueblo andaluz no está vencido aunque la tierra nos haga cada vez más pobres mientras unos pocos se hacen ricos. Diez días duró la huelga porque el hambre lleva siglos Andalucía, levántate gritamos al despedirnos.